Gel hidroalcohólico para el tratamiento higiénico y la desinfección quirúrgica de manos por fricción. Bactericida: higiene de manos (EN 1500), desinfección quirúrgica (EN 12791). Tuberculicida.  Fungicida.  Virucida. Activo frente a VIH, PRV (VHB), BVDV (VHC), Influenza virus (H5N1). Producto Biocida. Respete las precauciones de uso. Utilice de forma segura. Lea siempre la etiqueta y la información sobre el biocida antes de usarlo.

Antiséptico de uso tópico de amplio espectro de actividad, que presenta la actividad microbicida del iodo elemento. El compuesto en sí es inactivo, pero lentamente va liberando yodo orgánico, que es el que posee la actividad bactericida. Su actividad frente a microbacterias es variable y a las concentraciones habituales de uso no es esporicida. Indicado para el lavado quirúrgico de manos y de zonas con vello, también para el lavado preoperatorio de pacientes y la desinfección de la piel sana del paciente antes de la cirugía.

Antisséptico para piel sana. Higiene antiséptica de la piel. Destinado al uso sanitario, clinico y hospitalario con actividad antiséptica. PT1: producto biocida para la higiene humana.

Líquido incoloro y transparente con acción bactericida rápida, pero poco efecto residual. Presenta un inicio de acción retardado, motivo por el que hay que dejarlo actuar durante 2 minutos antes de cualquier procedimiento. Su uso está indicado en la antisepsia previa a punciones venosas, inyecciones subcutáneas, inyecciones intradérmicas, inyecciones intramusculares y extracciones de sangre. No debe utiliizarse sobre heridas porque irrita el tejido dañado y porque puede formar un coágulo que protege las bacterias sobrevivientes.

Cepillos desechables de uso quirúrgico, de gran nivel desinfectante, formulados con un tensoactivo hipoalergénico, al que se le incorpora povidona iodada o clorhexidina digluconato.

La actividad antiséptica de la clorhexidina es superior a la de la povidona, el alcohol y el hexaclorofeno. Es poco soluble el agua, por lo que se utiliza bajo forma de sales: diacetato, diclorhidrato y digluconato. De estas tres, el digluconato es la más soluble en agua y alcoholes. Es un antiséptico tópico ideal, debido a su persistente actividad sobre la piel con el uso continuo, un efecto muy rápido y una mínima absorción. A bajas concentraciones, la clorhexidina exhibe un efecto bacteriostático, mientras que a altas concentraciones es bactericida. Formato de venta en botella de 500 ml.

El primer antiséptico de manos de base alcohólica y el favorito de millones de usuarios en todo el mundo gracias a su fiable actividad antimicrobiana y su dermotolerancia, que le ha hecho superar todas las pruebas a lo largo de muchas décadas. Sterillium® es adecuado para la desinfección higiénica y quirúrgica de las manos por frotación. Se utiliza en cualquier ámbito donde pueden existir focos de infección y se pueda dar transmisión cruzada. Muy buena dermotolerancia, incluso en períodos largos de uso. 1,5 minutos de tiempo de aplicación para la antisepsia quirúrgica de manos. Especialmente eficaz contra bacterias y virus encapsulados.

La clorhexidina es una sustancia desinfectante de acción bactericida y fungicida. Pertenece al grupo químico de las biguanidas, que poseen actividad antimalárica. La clorhexidina es la más efectiva de las biguanidas con poder antiséptico. Es poco soluble en el agua, por lo que se utiliza en forma de sales: diacetato, diclorhidrato o digluconato. De estas tres, el digluconato es la más soluble en agua y alcoholes.

Por su equilibrada composición y pH identico al de la piel está recomendado su uso para el lavado de cualquier tipo de pieles dentro del mundo hospitalario. Especialmente para el lavado de la piel sensible a los alcalis y los jabones. Formato de venta en botella de 1 litro.

En la mayoría de áreas sanitarias nos lavamos las manos demasiado a menudo a pesar que no ofrece una reducción de microorganismos suficiente y deteriora el estado de la piel. Por eso un lavado de manos más corto, la piel se mantiene más cuidada. Lavarse las manos frecuentemente puede provocar irritaciones en la piel. Por lo tanto, la dermotolerancia de las lociones de lavado es imprescindible.